En busca del descanso


Mientras caminaba lentamente recordaba todo lo vivido, que fue mucho. Inmune al bullicio del mercado callejero, ajena a la belleza de los soberbios edificios que la rodeaban, sentía que el camino se le hacía caad vez más cuesta arriba; aquello que sus cansados ojos veían cercano sus agotadas piernas lo sentían inalcanzable. Incluso el bastón pasaba a veces de ayuda a pesada carga. Sí; era el momento de ir a descansar. Sin lugar a dudas, se lo había ganado.

Felices vacaciones a todos.